Sin descanso, forestales habaneros celebran su día
Los trabajadores forestales laboramos siempre en función de mejorar y preservar el medio ambiente, afirmó Alexander Motolongo, director técnico y de desarrollo de la Empresa Agroforestal Habana.
Este mes tiene en Cuba un significado especial para ese sector: comienza con el 5 de junio, con el Día del Medio Ambiente, y continúa el 21, con la celebración del Día del Trabajador Forestal.
En estos tiempos de aislamiento social y físico, con motivo de la COVID-19, el desvelo por la protección naturaleza no ha cesado: el día 5 se realizó en la capital cubana una siembra en el llamado parque de la Fuente de la Juventud y otra en las áreas aledañas a la tienda Galerías Paseo, muy próximo a la primera línea de costa, despoblada de plantas, explicó Motolongo a Tribuna de La Habana.
El directivo señaló que entonces se plantaron allí uvas caletas y vomitel, esta última utilizada como planta medicinal contra enfermedades inflamatorias de los órganos pectorales y abdominales, entre otras. Sin embargo, la siembra proseguirá en esa línea costera, que, además de la escasez de arbolado, sufre los embates de la penetración del mar.
Este 21 de junio, se inicia también el cultivo de todas las áreas que debemos reforestar, para lo cual, desde agosto del año pasado, comenzamos la reparación de los viveros y ya tenemos las posturas listas para ejecutar la campaña 2019-2020, subrayó.
A su vez, repondremos las fallas de las posturas sembradas el pasado año, en saludo al aniversario 500 de la fundación de La Habana, en el Parque Ecológico Monte Barreto, de 16 hectáreas, entregado en custodia a la empresa por el gobierno de la capital, con el objetivo de que ese sea uno de los espacios más bellos del municipio de Playa, detalló.
Motolongo exhortó a los trabajadores forestales de La Habana y del resto del país a impulsar los planes de producción, pues el país necesita el carbón, la miel, el café, el cacao, la madera aserrada.
Para el directivo, esta intensa labor debe realizarse cumpliendo siempre con rigor las medidas higiénico-sanitarias establecidas por las máximas autoridades de Salud Pública y del Gobierno de Cuba, porque lo más importante en nuestra sociedad son las personas. “Los forestales somos una familia desde el cabo de San Antonio hasta la Punta de Maisí”, aseveró.
Durante este periodo de la COVID-19, los distintos colectivos pertenecientes a la empresa, que cuenta con 126 fincas forestales, han laborado para cumplir un compromiso prioritario: entregar todos los días una tonelada de alimentos en los mercados de la capital. “Eso se ha ido cumpliendo, nuestros trabajadores, finqueras y finqueros han estado trabajando en función de contribuir a ese objetivo”.
A su vez, dijo, se han enfocado también en la preparación de los módulos pecuarios: “la concentración en determinadas fincas de especies pecuarias, con toda la bioseguridad que llevan, con el propósito de producir cinco kilogramos de carne por trabajador de la empresa y después, contribuir a la alimentación de los territorios donde se encuentran enclavadas en las fincas forestales de la empresa.
De acuerdo con Motolongo, unido a esas acciones, la empresa comenzará las plantaciones de café. “La ciudad tiene un plan de siembra de unas 10 hectáreas, que pensamos sobrecumplir, porque en estos momentos tenemos en el vivero de la Unidad Empresarial de Base del Chico posturas para 17 hectáreas. Sembraremos 15 y dejaremos dos hectáreas para la reposición de fallas”.
Con relación a las labores en áreas periurbanas, en lo que en décadas anteriores se conoció como el Cordón de La Habana, explicó que las siembras del grano serán en los municipios de Arroyo Naranjo, La Habana del Este, Guanabacoa, San Miguel del Padrón, La Lisa, Marianao. A su vez, la entidad comercializa sus posturas al resto de las empresas agropecuarias de la ciudad para sus planes de café.
No son pocas las misiones que emprende esta entidad que responde por la administración de bosques, la producción de alimentos y recursos maderables, y labores de jardinería, entre otras.
El director técnico y de desarrollo de la Empresa Agroforestal Habana se refirió también a la necesidad del país de acelerar acciones para la exportación de productos no tradicionales. “Tradicionalmente, el Grupo Agroforestal exporta rubros como miel, carbón, cacao y café. Entre los no tradicionales, se encuentran las plantas ornamentales. La empresa tiene un cliente en España, al cual ya enviamos el primer contenedor y estamos negociando exportar otros cuatro en lo que resta de año”.
Según Motolongo, “esto sería un grano de arena al llamado de nuestro Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, de incrementar las exportaciones, a partir de buscar otros rubros que puedan interesar en el mercado externo”.
